YPF mejoró su performance pero cerró el trimestre con una pérdida de $35.000 millones
La petrolera mejoró la mayoría de los indicadores en relación con el trimestre anterior pero no logró eludir el impacto de la crisis. La producción de petróleo de Vaca Muerta volvió a ser una buena noticia al crecer un 11% en la comparación interanual.
La petrolera de mayoría estatal YPF presentó esta tarde el balance del tercer trimestre del año en donde, si bien mejoró la mayoría de los indicadores del anterior corte, no logró revertir la crisis generada por el aislamiento social y la caída de precios que la llevaron a tener una pérdida neta de 35.322 millones de pesos.
La compañía informó una fuerte recuperación de casi todos los indicadores con relación a lo que fue el segundo trimestre del año, en donde el nivel de pérdidas se disparó hasta los 85.000 millones de pesos por el doble impacto negativo de la caída del consumo y de los precios de sus productos.
En este tercer trimestre la operadora logró recomponer buena parte de las ventas de combustibles, que crecieron un 41% en el caso de las naftas y un 22% para el gasoil, pero que de todos modos siguieron estando un 32 y 18%, respectivamente, por debajo de los niveles del mismo trimestre del año pasado.
En las refinerías el nivel de actividad también se fue recuperando, dado que pasó de un 63% en el segundo trimestre a un 73% en este corte.
Pero la crisis no fue tan generosa con los ingresos que logró tener YPF, ya que si bien mejoraron un 20% con respecto al balance anterior, se ubicaron un 30% por debajo del año pasado, alcanzando un total de 2,327 millones de dólares, unos 1.100 millones menos que el mismo trimestre del 2019.
La operadora destacó que logró mantener su producción estable en unos 468.000 barriles equivalentes diarios, mostrando una leve alza del 0.4% con respecto al trimestre anterior pero una baja del 9% en comparación con el año pasado.
En este segmento, la firma tuvo su fuerte en el shale en donde logró un incremento en la producción interanual del 11%. Pero en contrapartida la producción convencional de petróleo se contrajo un 12% en comparación con el 2019.
El lifting cost, es decir el costo de extraer un barril hacia la superficie, tuvo una gran mejoría ya que se redujo no solo un 9,4% con respecto al trimestre anterior sino también un 37% sobre el año pasado, siendo ahora de apenas 7,6 dólares por barril.
Desde YPF se destacó que «las decisiones adoptadas por la compañía desde abril, en el marco de una crisis inédita generada por la pandemia, le permitieron a YPF mejorar ingresos, mantener costos bajo control, preservar la caja, despejar el futuro financiero y recuperar gradualmente la actividad, con un impacto positivo en el Ebitda que mejoró
significativamente en el tercer trimestre».
A su vez, se señaló que «durante este período, se levantaron 35 equipos en las provincias de Chubut, Mendoza, Neuquén y Santa Cruz que permitió frenar la caída de la producción, aunque en niveles por debajo de la pre-pandemia y adecuados a las necesidades de mercado» .
Además se advirtió que «trimestre contra trimestre, las inversiones crecieron un 72,2%» y que «los costos se mantuvieron bajo control a medida que avanzó la implementación de un programa de eficiencia en toda la compañía que permitió que los gastos operativos, excluyendo
compras y regalías, disminuyan un 19% respecto del trimestre anterior».
Por Victoria Terzaghi
Rio Negro